NO TIENES COSAS, ELLAS TE TIENEN A TI

índiceEs interesante contemplar cómo la mente se adapta a lo que observa y juzga como real. En un mínimo despiste, pasamos de ser un todo autoconsciente uno-no diferenciado, a definirnos en relación al objeto observado, o contexto en el que asumimos que nos encontramos.

Cuando decimos “este es mi ordenador”, estamos relacionándonos con el ordenador. Ahora bien: ¿quién se relaciona con el ordenador? La respuesta a esta pregunta para muchos es clara: YO. Y… ¿Quién soy yo? Curiosamente, para aquellos que han establecido que su ordenador es suyo, podrán preguntarse quienes son ellos en relación con el ordenador. Si atendemos con sutileza, es su relación con el ordenador la que le está definiendo.

Esto explica que nos sintamos diferentes cuando vamos a casa en autobús, a cuando nos vamos en coche o en bici. Lo mismo ocurre cuando entramos en una consulta médica. Nos sentimos diferentes que cuando entramos en nuestra casa (en un lugar podemos sentir que somos pacientes o médicos, en el otro no suele ser así). Ciertamente, en cualquier momento puede cambiar nuestra sensación de quienes somos, y vivirla como real.

hhnhhhEntonces, ¿Quién soy realmente?

Ciertamente, nuestra sensación de ser es conciencia en movimiento. Sin embargo, hay algo que está más allá de todo esto. Ciertamente, estamos más allá de cualquier concreción. Nos une tanto esta realidad, como nuestra capacidad para concretarnos dentro del mundo que asumimos como real. El desconocimiento de esto, es fuente de conflicto.

Sin embargo, este mundo en el que estamos, siempre estará más allá de nuestra capacidad para conocerlo, debido a los límites de nuestros sentidos. De ahí la importancia de estar abiertos a mejorar, paso a paso, nuestra sensación de cómo son las cosas en realidad.

En realidad, tu sensación de ser se concreta a través del mundo que aceptas como real y significativo a cada momento.

Por suerte, darse cuenta permite ir ganando en flexibilidad para moverse en diferentes contextos, adquiriendo progresivamente la capacidad para cuestionarnos el mundo y ver qué hay de irreal en lo que veíamos real, y de real en lo que no entraba en nuestra mente anteriormente.

Cada uno en su fuero interno es quien re-crea su mundo completamente.

Como práctica:

rukrukEsta práctica se basa en sentarse, respirar y observar los pensamientos.

Notaréis que, al comienzo, os hacéis uno con los pensamientos, o vais detrás de ellos. Sin embargo, conforme os vayáis dando cuenta de ello, podéis dar un paso atrás y observarlos. Es decir, poner los pensamientos delante de vosotros o, mejor dicho, mirar desde vosotros a los pensamientos. Se trata de observarlos.

Transcurridos unos minutos, notaréis que podéis situaros en una posición de amplitud mental mucho mayor, desconectada de los pensamientos que observáis. Notando claramente que los pensamientos no sois vosotras/os.

Llegados a este punto, puedes jugar a introducir objetos o personas significativas en tu vida, y notar cómo la vente va en busca de estos objetos mentales, utilizando la definición que les has dado, así como la relación que te une con ellos, para definirte a ti también. Puedes hacer el trabajo varias veces, volviendo adelante y atrás, para comprender experiencialmente todo el proceso.

Written By
More from Meditarte
EL ESPEJO “Meditación”
Nuestro reflejo en un espejo nos muestra nuestra imagen de forma muy...
Read More
Join the Conversation

1 Comment

Leave a comment

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *