Meditación sobre el YOSOY.
Prácticas iniciales 1
Esta meditación es una meditación sencilla, pero sin embargo tan poderosa que vale tanto para comenzar a meditar, como para personas que llevan toda la vida meditando. La diferencia estriba en que mientras aquellos que comienzan, su trabajo va a estar más en alcanzar el silencio para vivir la sensación del ser, para los que llevan más tiempo meditando y que han adquirido la práctica de entrar en el silencio con rapidez, la meditación va a estar más centrada en explorar la conexión y extensión del ser, hasta vivir la experiencia del todo uno.
La meditación inicial pasaría por sentarse tranquilamente en postura de meditación, y conectar con la respiración. Para ello hacer un par de respiraciones profundas y pasar a respirar de manera completa con normalidad. De esta manera, con cada respiración, empezar a pronunciar internamente: al inspirar YO, y al espirar SOY. Se trata de hacernos conscientes de nuestra presencia.
Cuando llevemos un par de minutos, y para ayudar a la concentración, cambiar a una respiración cuadrada, por ejemplo un 3-3-3-3 o un 4-4-4-4, esto es: 3 segundos inspiramos “YO”, 3 segundos al lleno en silencio, 3 segundos espirando “SOY”, 3 segundos al vacío. En este punto no va a ser necesario forzar las cosas hasta fatigarse. El objetivo es mantener la atención ocupada en la respiración y en la sensación del ser.
Cuando consigamos un nivel de silencio y sensación de ser que consideremos adecuado, podemos dejar esta respiración y disfrutar de nosotros mismos respirando. Si vemos que nos despistamos, podemos volver a conectar con la respiración cuadrada.
Esto lo podemos practicar entre 15 y 30 minutos al comienzo.
Ya iremos introduciendo variantes en torno al YOSOY, que se mantendrá como tema central en varios artículos.